lunes, 17 de mayo de 2010

Turku Tropikal, Parte 1: la piscina

Aloha!



Pues sí, amigos. Resulta que este último fin de semana Finlandia ha sido el lugar más calido de Europa. Así, sin avisar y sin anestesia ni nada. ¡Y vosotros que pensábais que veníamos aquí a pasar mas frío que pelando rábanos! Nada más lejos de la realidad. Llevamos unos días sobrepasando ampliamente los 20°C de temperatura, y ayer incluso cayó una tormenta tropical superfuerte de una media hora (algo típico del monzón) que hizo que no pudiese salir de casa a tiempo para llegar puntual al ensayo. ¿Qué será lo próximo? ¿Crecerán cocoteros en el Kauppatori? ¿Llegarán delfines rosados al río Aura? ¿Se posarán guacamayos en nuestro balcón? No de descarta ninguna de estas posibilidades. Lo que realmente me preocupa es ver qué hago ahora con mi mono de esquí y mis patines de hielo. Los guardaré para cuando viaje al frío Sur de Europa.



Como sabemos que es duro vivir en un país como el vuestro con un clima tan desagradable, desde Pelando Rábanos queremos llevar a cabo una labor social y haceros partícipes de cómo se vive en un país tropical como Finlandia, y concretamente en su ciudad más cálida: Turku. Porque al estar situada en el extremo suroeste, este punto es el más caliente del país, y habría que confirmar si incluso de toda escandinavia. Le mandaremos un mail al palangano Maldonado para ver qué opina del tema.


Un día cualquiera en Turku comienza con un buen desayuno en el balcón. Se está muy bien al solecito matutino, pues es mucho menos fuerte que el sol del mediodía. La única pega es que hay que tener cuidado y no dejar el plato solo porque los tucanes llegan y se comen las tostadas.
Se desayuna con tranquilidad, porque con un calor tan sofocante es malo hacer esfuerzos. Mejor tomarse la vida con parsimonia.



Una vez lleno el buche, una buena opción para continuar la jornada tropical es irse a la piscina para hacer la digestión. Lo único malo es que con el calor que haciendo últimamente, hay bastante gente en la cola de la entrada (se adjunta foto). Pero como el finés es un pueblo desarrollado y educado (del primer mundo, vamos) no importa que el sitio esté lleno, ya que no hay peligro de que te toque al lado una familia con Radiolé a toda pastilla, con perro ladrador y mordedor, con niños asilvestrados descontrolados... Todo es paz y armonía en la piscina, el lugar perfecto para sestear sobre el césped a la sombra de un árbol. Sí es verdad que de vez en cuando se escucha algún grito, sobre todo proveniente de muchachos que se agolpan para tirarse del trampolín, pero curiosamente estos gritos suelen ser en la lengua de Cervantes, o en la de Berlusconi.

Muchos nos habéis preguntado si la piscina era cubierta, si calentaban el agua, si la gente se ponía bañador y se metía a bañarse... Adjuntamos una serie de instantáneas demostrativas de que es una piscina normal y corriente, como las que hay en todos los sitios de veraneo, con las únicas diferencias de que no hay canis, y de que en los vestuarios hay sauna.











Esto ha sido todo en esta primera parte de Turku Tropical. Esperamos que hayáis disfrutado junto a nosotros (aunque sea indirectamente) del veranito finlandés, y que hayamos contribuido a derribar algunos mitos que seguro estaban en vuestras cabezas antes de ser lectores de Pelando Rábanos.

Durante esta semana publicaremos una segunda parte (al menos) contando más detalles sobre la vida en la cálida Finlandia.

Saludos tropicales!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Juas, juas....así que ahora entiendes por qué vuelvo yo tantas veces a DK...es el paraiso y los jodíos lo tienen bien escondido. Pero mejor así, que sino la liamos y tenemos canilandia y se quita todo el encanto. Arriba los países escandinavos...Por cierto, esta ola de calor está llegando a esta parte del mundo y creo que no me van a echar ni con agua caliente. Arriba la playita con barbacoa y con tranquilidad :-)


Rosana