miércoles, 27 de julio de 2011

Nordic Tour 2011. Parte 1: de playas y campings.

Hola muchachada!

Nuestra reciente ausencia se debe a las 2 semanas y pico que hemos tenido de merecidérrimas vacaciones y que hemos dedicado a recorrer el norte de Europa. Han sido 3.000 km entre Finlandia, Suecia (poco) y Noruega. Una pasada! Como pusimos en la entrada anterior, el mini-viaje a Hanko fue realmente para probar el coche "nuevo" en carretera. Y ahí ha estado el tío, dos semanas a tope entre autopistas, caminos de tierra, carreteras de montaña... y ha ido y vuelto divinamente. Y con solo 2 pedales! Quién necesita un embrague?

Tenemos pensado dedicar las próximas 3 entradas a este MacNífico tour nórdico: esta primera versará sobre el tema de los camping y las playas finlandesas, el segundo será un especial del festival de Pori Jazz, y en la tercera como guinda final contaremos cómo nos fue en los 8 días que pasamos rulando por Noruega. Así que ahí vamos. De playas y campings!


Introducción: Por motivos ajenos a mi voluntad la entrega de la tesis se convirtió en toda una odisea espacio-temporal, así que cuando por fin entregamos no pudimos menos que hacer una fiestuki en la casa para mis compis de laboratorio. Fue una comida internacional con platos y bebidas de diferentes países, aprovechando la multiculturalidad de nuestro grupo de investigación (están representados los 5 continentes!). Y para agradecer nuestra invitación, los compis nos regalaron dos entradas para el festival Pori Jazz, mítico en Finlandia. Pero para conocer los detalles de los conciertos debéis esperar unos días, hasta que publiquemos la parte 2 del Nordic Tour 2011.

Como Pori queda a unas 2 horas de Turku y cerca está la mejor playa de Finlandia, decidimos pegarnos unos días de merecido reposo playero en los días previos al festival. La mencionada playa se llama Yyteri (pronunciado más o menos Úuteri, así con la u chiquetica), y en ella hay un cámping que en todas las guías pone que es muy recomendable. Ahí va un mapita de la cosa para que os vayáis ubicando (si el mapa os sale centrado en Madrid es por culpa de Bill Gates; moveos hasta Finlandia para verlo. Ya sabeis, to p'arriba!).


Ver Nordic Tour 2011 (1) en un mapa más grande

El plan original era ir directamente al cámping de Yyteri, y eso hicimos. Pero al llegar nos informaron de que había una competición de fútbol playa y por eso el sitio estaba lleno de mushashos/as, y además el precio era como el triple de lo normal (95€ por noche!). Como no estábamos por la labor de pagar eso, nos fuimos al cámping más cercano, en Reposaari, donde sí pudimos reposar (qué ocurrente!) sin arruinarnos (15€ / noche). Es un sitio familiar y tranquilo, que aunque no tiene playa de arena fina tiene unos atardeceres maravillosos, y está rodeado de bosques y de zonas rocosas con grafolitos centenarios. Esto último me fascinó: la gente tiende a poner su nombre (o lo que sea) tallado en la roca, desde que llegaban marineros hace como 200 años. Y junto a mensajes viejunos se encuentran otros recientes de corte más freak. Adjuntamos algunas fotunis de paisajes Reposaarilainens y de las cosicas que la gente pone on the rocks.

Atardecer en el camping de Reposaari

Inscripciones bicentenarias

Inscripción ochentera total

También hay lugar para el arte

Y de sorpresa, la Axelbandet en 2003!!

Y para ir terminando y cerrando la entrada, haremos un par de reflexiones sobre los campings y las playas finlandesas, que para algo le hemos puesto ese título al post. Sobre los cámpings podemos ahora opinar con soltura depués de haber pasado prácticamente 2 semanas de nuestras vidas viviendo en ellos en 3 países diferentes. La semana previa al viaje estuvimos viendo otros blogs para consultar lo que nos hacía falta, y a ir de compras al Clas Ohlson y al Biltema, dos sitios especializados en esas cosas. Llenamos toda la parte trasera y el maletero del Chrysler Neon con material campístico, que utilizamos durante el viaje en su práctica totalidad.
En Finlandia nos quedamos en dos cámpings (Reposaari y Yyteri), en Suecia en Örebro (de 5 estrellas!) y en Noruega en otros dos, de los cuales daremos detalles en la Parte 3 de esta trilogía. Cada uno tuvo sus pros y sus contras. El de Reposaari era barato y familiar, limpio y coqueto, pero con muchos mosquitos. El de Yyteri más grande y con más gente, y por tanto menos limpio, pero al lado de la playa! El de Suecia de 5 estrellas era como una ciudad de caravanas, impresionantemente ordenado y limpio. Porque por el norte de Europa hay todo un sub-mundo dedicado al caravanismo. Es increíble la de sitios que hay para quedarse, y la de gente que hay con autocaravanas. Un mundo a explorar, amigos! Por nuestra parte hemos hecho un primer acercamiento, y vamos convirtiéndonos en pro: tras varios días de cámping terminamos montando la tienda en unos 10 minutos, y tecogiendo todo en alrededor de 20.

La tienda. Obsérvense las sillas y la mesa. Sibaritismo campinguero ante todo.

Barbacoita en Reposaari con makkaras y choclos

Y para terminar, unos apuntes sobre LA PLAYA de Finlandia. Yyteri es sin duda es la mejor, y posiblemente sea la única que los que no vivís por aquí consideraríais playa de verdad. Son varios kilómetros de una espectacular playa de arena fina. El día que pasamos allí hasta hizo un calor propio de cualquier playa de Andalucía. Sólo echamos de menos al de la trompetilla, al de "al bombón helado", y a los negritos vendiendo gafas de sol. Como me la describió mi jefe (había ido antes que nosotros): "no parece Finlandia". Y así es. Ahí van unas pics demostrativas.




Y esto ha sido todo por el momento. No ha quedado tan bien esta entrada, pero bueno, es lo que tiene la depresión post-vacacional. En breve volveremos con las otras dos partes del periplo nórdico, que seguramente sean mejores.

Hej då!

domingo, 3 de julio de 2011

Pelando Rábanos on the road

Heippa!

La pata bien, gracias. Se me curó curiosamente justo para la semana de vacaciones en Hispania. Pero eso es otra historia. Si hay tiempo habrá entrada, y si no pues ya si eso. Lo que venimos a contaros es última y gloriosa novedad rabaneira que tenemos: nos hemos comprado un coche!


Yeah! Un Chrysler Neon 2.0 16V. Es veterano, del año 2001, pero está en perfectas condiciones. Y tiene un equipillo de música bastante potente, con CD-mp3 y varios altavoces leñeros para disfrute de todos los vecinos. Y lo mejor de todo es que es AUTOMATICO! Se acabó el que se cale el motor al salir de un semáforo, el sufrir para subir las cuestas del parking del Corte Inglés (o del Corte Finés), y el tener que usar dos pies para conducir. Ya basta de andar cambiando marchas como un vulgar proletario. Ahora la mano derecha la podré tener libre para hacer cosas realmente útiles: programar el GPS, cambiar la música del arradio, cuidar la higiene personal...
Como tenemos previsto un viajito por carretera este verano (pronto en su blog favorito) para probarlo decidimos ir a echar el día a algún lugar que estuviese a un par de horas de camino. Y como en Turku está haciendo mucha calor (esta mañana ya hacían 26 °C a las 10h!) nada mejor que pasar el día en la playuki. De casualidad me encontré en el chat de gmail a la amiga turkulainen Eiri y le pregunté donde ir, y me recomendó Hanko. Tras buscar en internet donde quedaba eso, vimos que cumplía todos los requisitos: está a unos 150 km y tiene playa, además de varias cositas turísticas interesantes de ver. Así que preparamos la nevera (cortesía de Doña Rosa y Nandipappa), montamos en la macchina y allí nos plantamos.


Siguiendo las instrucciones de la simpática MariMappy, que estrenaba cable de alimentación (el original quedó en Bruselas...), llegamos hasta en centro de Hanko. Lo primero que hicimos es dar una vuelta de reconocimiento, y vimos que había varias playas, donde en una de ellas se estaba celebrando un torneo de beach-volley y una regata. Por lo del volley había animación con música muy alta, algo extraño en Finlandia, país tranquilo y silencioso donde los haya. Para lo de las regatas también habia animacion pero en otra playa más lejana, por lo que no afectaba colateralmente a nuestros planes. Ahí van unas fotunis sobre lo narrado brevemente para que visualicéis mejor la cosa.




Como lo que nos apetecía era descansar, decidimos mudarnos a otra playa adyacente más familiar y tranquila, donde almorzamos y dormimos una siestecita, como buenos domingueros. Lo bueno de las playas finlandesas es que no se necesita sombrilla. Como veréis en las imágenes no hay nadie que la use. El sol nórdico calienta pero no quema demasiado, al menos a gente como la Negris y yo con una cantidad suficiente de melanina en la epidermis, porque a alguno vimos por ahí con la cara más colorá que Hellboy. Y el agua del Báltico por estas fechas está calentita! Todo perfecto: hace calorcito pero sin pasarse, el agua está tibiesita, no hay vendedores ambulantes que te bombardeen con "al bombón heladooo", "boliiinhas de Berliiim", "a la orden"... Ay, si el verano finlandés no fuese tan efímero!



Si sois observadores y lectores habituales del blog igual os habeis dado cuenta en este tiempo de lo especial que es el paisaje playero finlandés. Por toda la movida que hubo hace miles de años de glaciaciones y des-glaciaciones (lo que viene a ser el cambio climático normal de nuestro planeta) las superficie de Finlandia es muy lisa y está cubierta de rocas con forma redondeada, fruto de la erosión del hielo. Si añadimos los bosques llenos de coníferas y musgos, nos quedan bellas fotos como las siguientes:





Os habeis percatado de la peculiaridad de la ultima foto? Volved a mirarla. No veis nada particular? Efectivamente, en medio de las piedras hay un payo caminando alegremente sin bañador. No estaba en la playa en la que estuvimos primero sino en otra contigua cercana al puerto. Descubrimos que Hanko está altamente polarizado: a un lado hay una playita tranquila y familiar con abuelos y sus nietos junto a shavale que charlan relajadamente mientras toman el sol, mientras que otra zona la ocupan hordas de individuos e individuas que se dedican a hacer competiciones de volley-playa a ritmo de reggaeton, a llevar música alta con amplis portátiles, y obviamente a beber mucha cerveza. Dentro de esta polarización, hay también subdivisiones. Los tiesos hacen todo esto en la playa o en barcos medio chungos, mientras que la gente de bien pone la musica alta en sus Porsche y beben en yates. Porque aquí muchísima gente tiene barco. Hay 750.000 embarcaciones de recreo para 5,3 millones de fineses, o sea que casi todas las familias tienen. Y los muchachos se aprovechan para pasarlo pirata en verano. Eso sí, bajo la atenta mirada de la Poliisi: creo que vimos más policias en un rato en Hanko que en año y pico en Turku. Sin exagerar.






Interesante, verdad? Pues entre el playeo y observar a la fauna local echamos un día estupendo, y aprovechamos para probar el carro en carretera antes del gran viaje veraniego.

Y para terminar, unas fotunis. La primera es una mía, me la hizo la Negris mientras tomaba unos apuntes de artit-ta para este nuestro blog en la trip-agenda:


Ahora van unas pics de las mansiones típicas de Hanko (ved alguna guia de Finlandia o la wikipedia, que lo explicará mejor que nosotros), y alguna foto artit-tica.





Y la última va dedicada a la gañanada exculapia, porque sé que son grandes amantes del ciclismo:


Y con esto y un bizcocho, hasta la próxima amiguetes!