domingo, 28 de febrero de 2010

Las entrevistas de Pelando Rábanos. Hoy: la Negris

Hoy estrenamos una nueva sección de actualidad en Pelando Rábanos. Se trata de una entrevista concedida en exclusiva por algún personaje influyente de la sociedad actual. En la sesión inagural contamos con la entrañable presencia de la Negris, colombiana residente en Paris que ha visitado por primera vez la que será su futura ciudad: Turku.


-Pelando Rábanos: Hola Negris. Antes de comenzar, sabemos que tiene familia viviendo en Chile. ¿Todos bien por allí?
-La Negris: Pues afortunadamente sí. Aunque las comunicaciones están difíciles, hemos conseguido averiguar que todos nuestros seres queridos están bien tras el terremoto. Me habría gustado hablar con La Flakis pero es complicado por los cortes en la energía. Desde aquí un fuerte abrazo a nuestra familia Chilombiana.

-P.R: Tras tu llegada a Turku, ¿qué es lo que más le ha llamado la atención tras el primer contacto con los finlandeses?
-L.N: Pues primero que todo decir que esta ciudad me dió buen feeling desde el principio, pero será que estoy influenciada por ser lectora habitual del blog. Me he dado cuenta de que los finlandeses son super tranquilos, y te contagian un poco de eso. Doy solo un un ejemplo: de vuelta del Ikea, saliendo los últimos y estando completamente solos en medio de las afueras turkulainens, no teníamos dinero suelto, así que para pagar los 2,50€ del billete de vuelta del autobús le dimos al conductor un billete de 50 euros. Ya nos esperábamos el insulto en correcto finés, pero el señor muy tranquilo (aunque sí un poco sorprendido) nos dio la vuelta sin refunfuñar, y diciendo "no problem, my friend". Un taxista de Paris nos habría puesto de vuelta y media.
Y respecto a la circulación, la gente no pita en los carros, y los que van en bicicleta siempre te respetan, y si por algún motivo les bloqueas, pues frenan y se apartan, pero nunca se giran a gritarte, ni siquiera te miran mal.

-P.R: Y ahora la pregunta clásica: ¿has pasado mucho frío?
-L.N: Pues yo me libré de los -19ºC, a mi me tocó siempre positifo, así que no tuve que pasar mucho frio. Lo único es que como estamos desde el sábado con mucho calor (+1ºC) todo se está empezando a descongelar y no es muy fácil caminar, todo está empantanado y muy resbaloso.
Me ha sorprendido que pese a que la ciudad esté cubierta de nieve, las niñas van en tacones y todo; yo no sé si podría caminar en la nieve con tacones sin irme al piso. Ya lo cantaba María Isabel: antes muerta que sencilla.




-P.R: ¿Y qué tal la comida?
-L.N: bien, he probado un restaurante chic llamado Blanko, el Hesburger (como el MacDonalds pero 100% finlandés), y hasta comida turca (no me refiero a Turku, sino de Turquía), porque nos invitaron a cenar un matrimonio de turco con turkesa y cocinaron comidas típicas turcas y turkulainens (qué lío!).

-P.R
: Cuéntenos algo más sobre su estancia. ¿A qué ha dedicado el fin de semana?
-L.N: Básicamente a conocer el centro de la ciudad y el apartamento (me ha gustado mucho la sauna y la piscina), y a ir de compras. Me sorprendió la cantidad de sitios de segunda mano que hay (llamados kirpputori), ya sea para ropa, muebles, decoración, etc... Se ve que a los finlandeses les preocupa el medio ambiente y tratan de reciclar al máximo. Hay cosas muy viejas, pero también puede encontrarse buen material. Tras visitar varios, nosotros al final nos decantamos por el Ikea (porque en Turku no hay Merkamueble... aún).

-P.R: ¿Y qué tal el idioma? ¿Ha aprendido algo de finés?
-L.N: Bien poco, por no decir nada. Sólo kiitos, moi moi, y hei. Aquí el inglés es fundamental. Casi todos hablan más o menos bien (o por lo menos mejor que yo), aunque sí es cierto que para vivir aquí es necesario conocer las cosas básicas, como para llenar un formulario, saber los días de la semana para ver los horarios y los días de cierre de las tiendas, etc. Yo creo que sí se puede sobrevivir un tiempo con el inglés, pero sin duda para integrarse hay que aprender finés. Como la publicidad está toda en finés, seguro que te pierdes las mejores ofertas.
Para comprobar nuestro nivel lingüístico, el domingo fuimos al cine a ver una peli americana (The men who stare at goats, altamente recomendable!), y me llamó la atención que las pelis son en V.O. pero los subtítulos están en Finés y en Sueco. Con lo que cuesta la entrada (10,50€ por persona), ya podrían también ponerlos en español!

P.R: Esto ha sido todo por hoy. Agradecemos a La Negris su amabilidad al dedicar parte de su valioso tiempo a responder nuestras preguntas chorras.
En el próximo programa, entrevistaremos a otro personaje con relevancia internacional.

Kiitos! Moi moi!

jueves, 25 de febrero de 2010

¡Siempre negatifo, nunca positifo!

Ofú, ya me he enterado del frío finlandés. Desde que he llegado hace casi 4 semanas, no hemos estado sobre cero (de ahí el título de la entrada). Pero nunca nunca, hasta la semana pasada, había pasado frío de verdad. Como he comentado anteriormente, eso del frío es relativo, y es cierto que pueden hacer -10ºC y estar agustito. Pero cuando hace viento la cosa se complica. Y si encima nos aproximamos a -20ºC, chungo pestiño. Y la semana pasada se aunaron ambos factores, con gran perjuicio de los seres humanos ibéricos que habitamos por estos lares. En toda la semana solo he ido de la casa al trabajo y viceversa, y en los 5 minutos del trayecto me quedaba pelao del tó. Mare de Deu!


Como no he hecho nada más que trabajar, tampoco tengo mucho que contar, pero me apetecía publicar algo en el blog. Mis mayores aventuras han sido incursiones al supermercado a por víveres y tratar de descifrar qué es lo que estaba comprando. Hoy casi que me compro un acondicionador para el pelo cuando lo que necesitaba era una crema para las manos. Menos mal que ya domino el FINNGLISH y he podido preguntarle a una amable empleada que me ha aconsejado qué crema llevarme. La lección de finés del día: crema para las manos = käsivoide.

Parece que lo peor ha pasado. Hoy se está bien, y el fin de semana pronostican unos 0ºC, o sea, ni frío ni calor.
Como estos días he estado (y estoy) estresadete con temas laborales, esta ha sido una micro-entrada solo para saludar, pero la semana que viene prometo entradas llenas de acción y aventuras a raudales. No voy a desvelar nada, para teneros en ascuas como a los adeptos de LOST. Sólo doy unas pistas: vuelta al laboratorio, visita conyugal el finde, y vuelta a los escenarios.
Como despedida, una bella foto de arte callejero que me he encontrado en mi incursión al supermercado.
Moi moi!

domingo, 21 de febrero de 2010

Olimpismo

Estos días me tiene invadido el espíritu olímpico invernal. Pero no es algo nuevo, me viene de lejos. A principios de los 90, cursando BUP tuvimos que hacer un trabajito sobre las olimpiadas modernas y me di cuenta de que son una cosa guay, a pesar de que las “inventara” un francés, el barón Pierre de Coubertin. Este señor fue el impulsor de la creación de unos juegos deportivos internacionales a modo de los clásicos griegos, y logró que el 1896 se perpetrara la primera olimpiada moderna en Atenas. Pero como todo esto lo encontráis en la wikipedia, paso a otras cosas.


Desde chico me gusta seguir los eventos deportivos internacionales que se dan cada mucho tiempo, como son las olimpiadas, el mundial de futbol, y el de atletismo. Ahora mismo no puedo porque no tengo tele, pero siempre me gustó quedarme hasta tarde viendo pruebas deportivas que normalmente uno no tiene la oportunidad de ver, como el hockey, piragüismo, judo... Cuando estos eventos son en otro continente es mucho mejor, porque los horarios te hacen dormir poco. Mola un montón tragarse una a las 3 de la mañana una final de tiro con arco, un Croacia-Paraguay de fútbol, una prueba de salto con pértiga femenina (siempre que participe Allison Stokke), o una carrera de biatlón, este último mi deporte de invierno favorito sin lugar a dudas. Para el que no lo sepa, el biatlón combina el esquí de fondo con el tiro al blanco, o sea que es eso que van esquiando con una escopeta a la espalda, y cada cierto tiempo paran y tienen que disparar a una diana. Y os voy a contar el por qué le veo una enorme grandeza al biatlón. Tengo la teoría de que cualquier deporte que naturalmente es un coñazo, ganaría mucho más añadiéndole el factor escopeta. Os pongo unos ejemplos para que los visualicéis.

1) Equitación. Es un rollo, todos los caballos haciendo el mismo recorrido, uno a uno. Pero ¿a que molaría que los jinetes saliesen todos a la vez y llevasen revólveres y las pruebas fuesen de supervivencia en plan far west? Los obstáculos servirían para refugiarse en lugar de para saltarlos. Una especie de paint-ball a caballo. Así sí vería la equitación, sin duda.

2) Vela. Unos barquitos detrás de otros, todos yendo despacio o rápido según el viento. Tostón supremo. Ahora, imaginaros los barcos con 100 cañones por banda, viento en popa a toda vela, disparando ráfagas para hundir a los adversarios. ¿Mola más o no?

Y es que si no hay acción, el deporte es aburrido. ¿A que todos os acordais del cabezazo de Zidane en la final del último mundial? Pero fijo que casi nadie se acuerda del resultado del partido. Eso es así. Y si todavía no lo teneis claro, mirad esta prueba de patinaje de velocidad:



Viendo esto, está claro que cualquiera puede llevarse una medalla olímpica. Sólo hay que ser un poquito espabilao y tener al karma de tu parte. Visto lo visto, y teniendo en cuenta el paupérrimo nivel del equipo español, yo ya he empezado a prepararme para mi particular sueño olímpico, y el jueves pasado fui a esquiar por primera vez. De aquí a 4 años creo que puedo estar listo para representar a España en alguna prueba de invierno (paso de las olimpiadas de verano que hace mucho calor). Ya veremos en qué participo. De momento he probado el ice-skating y el esquí de descenso. Para completar la trilogía de deportes invernales todavía me falta el esquí que los finlandeses consideran “el esquí normal”, que aquí es el de fondo. Pero ese sin escopeta no tiene gracia.




Aún queda una semanita de olimpiada de invierno. Espero que hagais como yo y apoyeis al equipo finlandés, ya que el español ha demostrado sobradamente su chunguez: la única que tenía opciones a medalla se piñó en el calentamiento de la final. Así que mejor ir con Finlandia, que es un valor algo más seguro. Por ahora namás que llevamos una medallita, a ver si en la última semana mejoramos algo. Me conformo con adelantar a Austria en el medallero.

¡ARRIBA FINLANDIA!

miércoles, 17 de febrero de 2010

Cometieron dos errores...

Hei hei!

Voy ahora mismo (martes por la noche) en el tren Helsinki – Turku, tras una reunión de casi 11 horas con gente de un proyecto común sobre biocombustibles, que es el tema de mi postdoc turkulainen. Traigo el culo cuadrao de estar tantas horas sentao, pero el cerebro lleno de buenas ideas. He ido en plan yupi, saliendo a primera hora por la mañana en primera clase, y volviendo por la noche tras el meeting en compañía de la jefaza. En el tren aprovecho que llevo el mini-PC y que no se ve nada por la ventanilla para escribir unas líneas y así entretenerme (es que la jefa va todo el rato corrigiendo artículos y hablando por el móvil). Pero como sé que nada de eso no os interesa, pasemos a cosas que os resultaran más entretenidas.

El título de la entrada viene de una de mis películas favoritas. Es una del oeste protagonizada por Clint Eastwood, donde lo acusan injustamente de robar caballos y es condenado a la horca. Pero los malos cometieron dos errores: el primero, acusar a un hombre inocente, y el segundo, dejarlo vivo. Un tiempo después, el bueno de Clint se recupera y decide tomarse la justicia por su mano, por lo que pasa el resto de la peli cargándose a todos los malos uno a uno. Con este bello flin aprendemos dos cosas de la vida: que desde la época del lejano oeste ya no se podía confiar en la justicia (como ahora), y que vengarse de los malos que te han puteado siempre es guay.
Pues llamo así a esta entrada porque esta semana he cometido dos graves errores que pasaré a narrar a continuación. Pero antes, como en una buena peli de Tarantino, para generar desconcierto y tensión en el espectador, inserto un plano secuencia del apartamento vacío, y a continuación un flashback narrativo.



El miércoles pasado me dieron las llaves del nuevo apartamento, ya lo sabéis a estas alturas. Como habéis comprobado en el plano secuencia, estaba vacío del todo. El viernes decidí pillar un bus (por primera vez en 2 semanas me monté en algo con ruedas) e irme al IKEA a por al menos una cama y algo para la cocina. Habría ido al Merkamueble, pero es que en Finlandia pasa igual que con los pingüinos, que no hay. Me compré una cama, algunas menudeces necesarias, y algo que os recomiendo a todos los que también emigréis a otro país con una mano delante y otra atrás: la STARTBOX! Es una cajita que trae todo lo necesario para la cocina.
Sin ninguna duda ahorra trillones de vueltas al supermercado, porque de verdad trae todas esas cosas que no te acuerdas de comprarlas hasta que te hacen falta: abrelatas, sacacorchos, tuppers, rayador (o rallador?), embudos, sartén, ollas, cuchillos y tablas para cortar… Gracias al karma, en el IKEA me encontré a mi nuevo jefe que andaba por allí con la family comiendo armondigas, y me volví con ellos en coche. Así pude llevarme muchas cosas, pero la cama y la startbox la mandé por envío a domicilio. Y ahora, un flash forward tarantiniano (niano niano).


El lunes por la tarde me llegaron los de IKEA, y de nuevo gracias al karma justo a tiempo, porque esa mañana había dejado la residencia y de no llegar esa noche tendría que haber dormido en el suelo. Al recibir el delivery, como ya iba a tener cama y utensilios de cocina, decidí con alegría ir al super y abastecerme de alimentos para hacerme una buena cenita e irme a mi nueva cama con la panza llena. Y es entonces cuando me di cuenta de que, igual que los malos de la peli del oeste, había cometido dos errores.

El primer error fue confiar en una multi-herramienta de bolsillo que tengo, que supuse suficiente para montar la cama. La verdad es que tiene un montón de cosas, y debido a mi vida nómada ha sido mi particular kit de MacGiver durante este año. Nunca me había fallado… hasta ayer. Cuando me puse a montar el tinglado, me di cuenta de mi primer error: ninguna de las llaves coincidía con las tuercas de las patas de la cama. Así que no me quedo más remedio que montarla en el suelo sobre unos cartones para no rayar el parqué. Primer error. Peaso de cama nueva, y termina encima de unos cartones.

El segundo error lo descubrí algo más tarde, al preparar la cena. Después de venir de comprar, y después de fregar todo el cacharrerío nuevo, para superar el chasco de lo de las patas me puse a cocinar para levantarme la moral. Eso lo aprendí de Bear Grylls, que para levantarse la moral cuando esta por ahí solo en medio de la jungla o del desierto, el nota siempre hace un fuego (no recomendable sobre parquet), se pone a hacer flexiones (de eso hace tiempo que me quité) o se cocina algo. Lógicamente yo opté por la opción C. Fue entonces cuando me di cuenta de mi segundo error: se me había olvidado comprar SAL. Una cosa tan sencilla, tan simple como el cloruro sódico cristalizado, hay que ver lo que se echa en falta cuando falta, valga la redundancia. Para estrenar la cocina me tuve que comer una cena sosa. Voy a escribirle a los de IKEA para que incluyan sal en el próximo lote de startbox.

Y fue de noche, acostado solo en mi inmensa y flamante cama sobre cartones, con la barriga llena pero de comida sosa, cuando me puse a reflexionar y me di cuenta de que a mí también me faltaba algo. Las patas de mi cama. Mi SAL particular...

jueves, 11 de febrero de 2010

A diez minutos del centro

Pues sí, amigos, tras una semana de intensa búsqueda, YA TENEMOS CASA TURKESA!
Finalmente el afortunado ha sido un apartamentico de 45 m2 aprox, con su suelo de parquet, su armario vestidor como el del anuncio de Heineken, su terracita para beber sidra en veranito (que ahora mismo tiene 10 cm de hielo), su sitio en el ático para guardar los esquís y en el sótano para las bicis, y su SAUNA. En realidad aquí casi todos los edificios tienen sauna; de hecho en las casas de veraneo se construyen primero la sauna y ya si eso la casa después, si da el presupuesto. Lo tienen como seña de identidad finlandesa. Creo que hasta en la constitución pone "...todo finés tiene derecho a tener acceso a una sauna..."
Y sí, está literalmente a 10 minutos del centro andando, y lo que es todavía mejor, a 5 minutos de reloj andando de mi trabajo. Que levanten la mano los que tarden eso en llegar a currar cada mañana. Eso es calidad de vida, amigos. Desde que he llegado a Finlandia he ido a todos lados a pata, ni siquiera en bici, en bus... Sólo tracción animal ibérica. Unicamente me llevaron en coche a ver un apartamento que lógicamente deseché por tener que llegar conduciendo.
Dejo una foto del edificio, señalando la ubicación de la TURKUKELI.


Ya solo hace falta llenarlo, porque viene vacío del todo. Creo que al principio dormiré en un colchón y comeré de pie en la cocina, mientras me voy buscando una cama, mesa, sillas... Al menos sí tiene luz y agua, y podré vivir en plan campamento hasta que adecente el lugar. Pero bueno, como este es el 8º sitio donde vivo en 6 años y pico, estoy habituado a la vida nómada. Lo próximo será una flagoneta, ¡ay payo!

Este fin de semana me mudo y aún no he probado si en el piso nuevo hay internet gratis (algún vecino o comercio cercano con wifi abierta), así que no sé cuándo escribiré de nuevo otra jugosa entrada. Lo haré en cuanto pueda y tenga algo interesante que contar.
Aprovecho la coyuntura para decirles a aquellos que critican que escribo mucho que en realidad no pierdo más tiempo que la media nacional. Tened en cuenta que desde hace un tiempo sigo la sana costumbre de no ver la tele (aunque tengo una en el cuarto), y además desde que me acabé de ver ME LLAMO EARL (con mayúsculas, por ser la mejor serie ever) tampoco estoy enganchado a ninguna serie por internet, así que lo que dedico a escribir cada entrada es más o menos el mismo tiempo que pasaría viendo un capítulo de LOST, o la primera parte de un Wigan - Sunderland en Canal + futbol, o pintando una figurita para una maqueta bélica...

Pues eso. Como propina y despedida, os dejo una bella panorámica de Turku tomada cuando iba a firmar el contrato de alquiler del apartamento.


lunes, 8 de febrero de 2010

Primer semaniversario en Turku

A pesar de lo que diga Madonna, el tiempo pasa muy rápido. Ni me he dado cuenta y ya llevo en Turku una semanaza completa, con sus siete días como siete soles.

Durante este tiempo me he dedicado básicamente a adaptarme al medio, y a conseguir toda esa serie de cosas que se supone que debes tener cuando vives en un sitio: número de identificación del ayuntamiento, cuenta del banco, contrato laboral, tarjeta de impuestos, apartamento, teléfono móvil finés... No puedo decir que conozco bien cómo funciona la cosa ni cómo va todo por aquí, pero sí que tras este tiempo me creo capacitado para responder lo que yo llamo preguntas de abuela. Como durante esta semana ya me ha caído alguna que otra cuestión de este tipo (vía telefónica y por mail), voy a intentar hacer una síntesis con todo lo que me preguntaría mi abuela, y con lo que le respondería tras una semana de vida en Finlandia.

-Pregunta de abuela nº 1 (seguro que la veis venir): ¿Está haciendo mucho frío?

Pues sí y no a la vez, abuela. Aquí me he dado cuenta de que eso del tiempo es relativo. El otro día cuando fuimos a patinar hacían -5ºC y mis compis me dijeron que hacía un tiempo estupendo. He aprendido que entre 0 y -5ºC la cosa está bien, e incluso hasta -10ºC si no hace viento. Frío es cuando baja de -10ºC ó cuando hace bastante viento. Y parece que me he librado de lo peor, pues lo chungo vino justo la semana de antes de que yo llegara.

-Pregunta de abuela nº 2: ¿Y con ese frío la gente sale a la calle y todo?

Pues claro, abuela, la gente hasta sale a hacer footing (trotar) y a pasear al perro y todo. Lo único es que cuando tienen que llevar algo de peso utilizan un trineo en vez de un carrito. Las personas mayores se dan sus paseítos con dos bastones de esquí, lo que se llama marcha nórdica. La gente va en bicicleta a trabajar... en fin, lo normal, pero más abrigado. Si no, mira el video que he grabado hoy para que veas que con todo lo que nevaba la gente iba por la calle como si nada.




-Pregunta de abuela nº 3: ¿Y vas bien abrigado?

Claro, abuela. Pero no te creas que hace falta tanto. Con un buen abrigo, unas botas, y obviamente el pack guantes-bufanda-gorro se va la mar de bien. Aquí muchos van incluso con vaqueros y con zapatos "normales". Yo por si acaso me he comprado un par de abrigos buenos, de segunda mano pero limpios.

-Pregunta de abuela nº 4: ¿Y allí que se come?

Pues la verdad es que aún no lo tengo muy claro. Como todos los días he estado dando vueltas por el tema de los papeleos y de ver apartamentos, he comido lo que he podido y donde he podido, y las cenas las hago de supervivencia. Ya si eso te lo cuento más adelante, cuando me estabilice y tenga una rutina diaria.

-Pregunta de abuela nº 5: ¿Y cómo te entiendes con la gente?

Con los que saben inglés en inglés, y con los que no pues con el idioma universal de los signos. Con el jefe no tengo problemas porque es australiano, que allí se habla también inglés. Yo creía que aquí todo el mundo hablaba bien inglés pero la verdad es que no son todos todos, la mayoría sí pero hay bastantes personas que del finés no pasan.

-Pregunta final de abuela: ¿Y estás contento?

Pues sí, abuela, en el trabajo me han puesto en un proyecto superinteresante, ya conozco a muchos de los compañeros y me llevo bien con ellos. Turku es muy seguro y tranquilo, aquí nunca pasa nada ni roban ni ná, y lo del frío lo estoy llevando mejor de lo que me esperaba. Casi que prefiero los -5ºC de aquí a los +45ºC de Sevilla en verano. O sea que en general, bien.

-Sentencia concluyente de la abuela: Hijo mío, si te va mal tú nos lo dices y vamos a recogerte, que como en Andalucía no se vive en ningún sitio.

Vale abuela, pero a ver dónde me coloco yo en Andalucía, con la que está cayendo...



Dedicado a mis abuelitas: a la abuela Manola, que seguramente leerá la entrada en breve y aparte de la ilusión que le hará le ahorraré trabajo preguntando, y a la abuela Encarna, que aunque la pobre ya no entiende mucho con la cabeza estoy seguro de que de alguna manera la dedicatoria le llegará al corazón.

sábado, 6 de febrero de 2010

Pelando Rábanos: el musical sobre hielo

Hei hei!

Con todos ustedes, presentamos el estreno de la aclamada obra: "Pelando Rábanos, el musical sobre hielo", en rigurosa primicia mundial, exclusiva para clientes VIP del blog. Voilà la masterpiece:


Este video está especialmente dedicado a los miembros y miembras del Atlético Fotosintético Patín Club.
¡Que las ocho ruedas nunca paren de rodar!


UPDATE: si teneis buen oído, habreis podido escuchar que voy comentando unas cosillas en el video. Pues a petición popular, ahí transcribo más o menos el contenido de la narración:

-19": Allí es donde trabajo, en los edificios del final: BioCity. Y al laíto, una pista de patinaje. Aquí estoy yo, y al fondo mis compis. ¡Todavía no me he caído, a ver si seguimos con la racha! [Que conste que no me caí en todo el día ^_^ Aunque un par de UYs sí que hubo]

-40": -Michele, un video.
-No, no!
-(me parto el ojete)

Y ya está. No era nada interesante, pero así por lo menos no os quedais con la incógnita.

Moi moi!

jueves, 4 de febrero de 2010

Volviéndome Suomen apoquitoapoco

Hei!

Tras andar más que kung-fu por estos parajes nevados, por fin he logrado varias de las cosas indispensables para la vida en Turku. A saber: una cuenta en el banco, un número que me identifica como residente, un contrato laboral, mi careto en la página web del centro donde trabajo, y ¡unos patines de hielo! Sólo me falta una sesión de sauna (a la que iré en unos minutos) para sentirme verdaderamente como en casa.



Con todo esto podría surgir la pregunta, ¿me estaré volviendo finlandés? Tranquilos, que creo que no. Es duro vencer a la genética. Y como muestra, un botón: almorzando este mediodía en el comedor de la universidad, al ir a pagar la señora de la caja me ha preguntado "student?" y como me ahorraba 3 euros, mis genes hispánicos se han activado y he dicho que sí, y he mostrado mi MacNífica tarjeta de la Universidad de Sevilla, con el consiguiente descuento. El que nace lechón... Pero que conste que no soy el único. Tengo un amigo (al que voy a mantener en el economato) que gana una buena pasta gansa trabajando para cierto organismo internacional en cierta capital europea, y el nota sigue tirando de carnet de estudiante cuando se puede arañar algún leiro. Su mujer, como la mía, no es española, y cuando vamos juntos a algún lado nosotros no dudamos en sacar el carnet de estudiante. A ellas les sigue dando cosica, pero nosotros tan frescos, que para algo hemos pagado más de una década de matrículas a la universidad. Por cierto, ambos crecimos en el mismo barrio. ¿Fue algo que había en el agua? ¿La influencia de "la bola de cristal" durante nuestra niñez? ¿La herencia de los ocho siglos de ocupación musulmana? Who knows...


Los patines pienso estrenarlos este finde. Y atención, porque se me ha ocurrido una cosa brillantérrima. Ya sabeis que los musicales están de moda, y que a pesar de que son todos lo mismo pero con disfraces diferentes, los teatros se llenan de gente que va a ver todas esas fantochadas de Mamma mia, Chicago, la Bella y la Bestia (y otras animaladas de Disney), Grease, etc... Y bien sabeis que cuando el show está quemado y nadie va al teatro a verlo, van y sacan el mismo musical pero sobre hielo, para que los niños obliguen a sus padres a llevarlos. Pues bien, siguiendo el ejemplo se me ha ocurrido la idea de crear un Pelando Rábanos: el musical sobre hielo. ¡Estad atentos a la pequeña pantalla pixelada, amigos!


Otra actividad que me ocupa estos días, además de las vueltas que hay que dar por culpa de la burrocracia, es la búsqueda de apartamento. Hoy he tenido que ir dos veces al centro de la ciudad (2 trayectos de 20 minutos x 2), además de ir y venir al trabajo, que menos mal que está cerca de donde vivo ahora (2 trayectos de 7 minutos). O sea que en total habré andado hoy... una jartá. Me merezco la saunita de después, sin duda.
La búsqueda de alojamiento me ha servido para comprobar la falsedad del mito de que aquí se puede vivir perfectamente sólo con el inglés. NI DE COÑA. Casi todas las páginas web inmobiliarias están en finés. Si no, a ver quien tiene webbers de descifrar el contenido de esta página. Y otra es que la mayoría de gente a la que llamas habla un inglés más bien regulero. Hoy incluso una p**a ni siquiera me ha respondido en otro idioma que no fuese el suyo, así que tras varios minutos sólo he entendido el hei del principio y el kiitos del final. Un rato después, a esa mispa pe**a le he escrito como venganza un mail en finés, traducido con el google-translator. Para que vea lo que se siente al no entender nada. Y como no me responda, mañana le escribo directamente en español insultante. Se aceptan propuestas en los comentarios sobre qué debo ponerle a esa mala-pécora mono-lingüe.

Nähdään pian!

martes, 2 de febrero de 2010

¡Desembarcando!

¡Hola from Finland!

Ya estoy en Turku. Llevo 24h aprox. por estos lares y como sé que estais deseosos de tener noticias, aquí va un post cargaíto de información calentita. ¿Calentita? Ojalá.

Empezamos por el viaje. Conmigo mi maleta samsonite con 20 kg exactos de ropa y algún libro, mi trompeta copper bell y la mochila con el ordenador. No mucho para ser una mudanza definitiva, pero ya nos iremos abasteciendo entre lo que compremos aquí y las cosas que quedan por mis diversas casas.

Paris me despidió con una nevada bastante seria (ver foto abajo). Tanto que se retrasó el vuelo 1 hora porque tuvo que pasar por el de-icing. Eso es que como se congelan las alas hay unos simpáticos camioncitos llamados Elephant Beta que echan agua mezclada con propilen-glicol a 60ºC. Eso lo aprendí en la hora de espera leyendo la revista de Scandinavian Airlines.




Llegué a Arlanda (el aeropuerto de Estocolmo) justo a tiempo para embarcar, con mi equipaje de mano. Como la diferencia entre llegada y salida fue de unos 20 minutos, ya daba por sentado que mi maleta no la habrían cambiado de avión y que al llegar a Turku me esperaría un infierno burocrático para recuperarla. Pero cuando llegué, mágicamente mi maleta apareció entre las primeras. ¡Estos escandinavos saben hacer las cosas! Si me llega a pasar en Barajas...
El vuelo Estocolmo-Turku dura 45 mins y sobrevuela el mar, pero casi ni se ve porque todo está nevado. Namás que árboles y nieve. Por cierto, el avión era uno de esos chico de hélice, una grata experiencia. Me hacía recordar a los que pilotaba Murdoch en El Equipo A. Adjunto fotuni para que lo veais, tomada en el tiempo en que esperaba sin esperanza a que apareciese mi maleta. Prestad atención al aeropuerto de Turku. He estado en estaciones de metro más grandes...




Una vez recogida la maleta, me vino a buscar mi nuevo jefe, y me llevó en coche hasta la residencia, que pertenece a la universidad y es especial para gente como yo, y no me refiero a superguays, sino a researchers o profesores que vienen por poco tiempo a Turku. O sea, que no hay estudiantes ni Erasmus ni formas afines. Una especie de Colegio de España de la Cité U. de Paris, pero a la finlandesa. Lógicamente, la residencia tiene una SAUNA! ^_^ Si no, no sería Finlandia. Los jueves es gratis, así que pasado mañana la probaré. ¡Estaros atentos al blog! Adelanto desde ya que no habrá foto mía en modo sauna. ¿O sí? :p
El vecino de habitación resultó ser un matemático medio boliviano medio chileno, y fuimos a cenar por ahí, pero prontico pa la cama que había que estar fresco para hoy.

Esta mañana he llegado a donde trabajaré, y he estado todo el día dando más vueltas que un manco en una barca: conociendo a gente, firmando cosas, solicitando accesos variados, registrándome en mil sitios... Además de deambular por el edificio, he tenido que patearme toda la ciudad para ir a diversos lugares, como la oficina del ayuntamiento donde se registran los extranjeros (que está dentro de un centro comercial), la policía, el banco... Al menos he aprovechado para pasear por el centro en un día de diario. Adjunto un par de videitos grabados especialmente para este nuestro blog. Y sí, lo que suena soy yo sorbiendome los mocunis que se me caían del frío que hacía.





Pues es todo de momento. ¡Gros bisous from Turku!